Indagando

Ideales.

Se han escrito miles de historias, ensayos, teorías sobre esta posiblemente mal llamada metáfora: La vida es un sueño, estamos dormidos. Pero qué sucede cuando nuestra aparente consciencia genera pensamientos más poderosos que ésta imaginaria realidad, capaces de cambiar ese presente constante e inmutable. Mi incapacidad de viajar por otras consciencias me impide confirmar si es por decisión personal, pero si hay claridad en una cosa: Se vive dormido o en intentos de despertar. Lo que diferencia una existencia mortal de una inmortal es el despertar, aunque sea por segundos, Ver.

Se les llama visionarios, genios o héroes, y lo que ven es el 'más' para aquellos que dicen que "debe haber algo más que esto". La verdad, como otros la han nombrado, al describirla se vuelve un ideal para los dormidos; si resulta que en esta imaginaria realidad esa verdad es empírica, se vuelve ley.

Sin embargo, la noción de poder es infinita, universal e indimensional, no debemos olvidar que es el aire que respiran los ideales. poder. De comunicación, de convencimiento, de persuasión, de sensibilización. Poder. Económico, político, social, religioso. Debe 'poder' anidarse en la consciencia de los dormidos y afectar las neuronas, instigando valor, fuerza, anarquía, rabia, inconformidad, miedo, odio, tranquilidad, fe, impotencia, seguridad, obediencia o amor. Muchos ideales han muerto por fallas respiratorias.
Al reflexionar acerca de cuál ha sido el motor de los cambios se encuentran todas esas palabras y como gasolina, al ideal que las inspiró.

Ya se sabe que lo único que no cambia es el cambio, si los ideales fueran comida moriríamos de obesidad, mórbida. Dormidos y gordos. No es sólo otra metáfora más, es fácil detectar que no es algo saludable.

Por lo tanto, tengo el ideal de que dejemos de vivir de ideales, para eso nos debemos despertar por completo, todos. El cambio supremo. Una rebelión contra la jerarquización de la vida y la no vida, donde la humanidad está abajo. Viviendo. Y la no vida arriba, siendo ‘más’ y nosotros admirando. El elitismo supremo.
O quizás todos sólo soy yo, sería irónico que por el miedo de encontrarme única y sola quiera volver a dormir. E inventarlos. Teológicamente hablando, Dios pudo crear la vida por esa causa. Entonces yo sería el sueño de Dios, pero eso ya es de Borges y tomarlo como la verdadera verdad sería muy deprimente. No volveré a pensar en eso.

Las ciencias y las filosofías están intrínsecamente conectadas. Todas son pequeños vistazos de la verdad, sólo hay que armarla como un rompecabezas. De este lado, si es que es posible. Es más saludable dormidos y gordos.

…

Continuaré indagando al respecto en otra oportunidad. Por los momentos concluyo.

Antes de morir dormida. Quiero Quiero Quiero.
Quiero vivir intentando despertar y quiero armar el rompecabezas y quiero poder. Pero penosamente debo admitir que todo lo que quiero pende de un hilo, que a la vez pende de otro:
Que vivir dormida sea una decisión y que ustedes no sean códigos binarios.