domingo, 30 de enero de 2011

¿Minicuento?

El hijo masajeaba las nalgas mejor que el esposo. Sus dedos no eran turistas por sus jardines. El placer le ganó a la culpa, y ahora sobran gavetas.

miércoles, 12 de enero de 2011

Volviendo a mis orígenes.

Para mí el 2011 no ha comenzado. Yo particularmente lamenté la muerte del 2010 por la manera tan brusca como interrumpió mis planes. Entre las fiestas y las vacaciones, no me dio tiempo para planificar mi próximo y primer paso en el año nuevo. Ahora estoy aquí, 12 de enero del 2011, con muchas cosas en estado 'loading' y con una sola cosa segura. Una sola cosa que, con la finura de un cabello y la fuerza latente del acero, carga ella sola el peso de una 'continuidad' de vida.